HCC St. Moritz, un alojamiento histórico con las comodidades del siglo XXI

Una escapada a Barcelona  en cualquier momento del año va a tener siempre un carácter especial. El simple hecho de recorrer la ciudad y descubrir las sorpresas que alberga es en sí una experiencia única. Pero hay otros dos condicionantes que le pueden dar un plus de emoción al viaje a la ciudad condal. Uno es la zona en la que el viajero decide alojarse y otro el hotel seleccionado. A veces parece un simple trámite, pero tiene mucha más importancia de la que parece. Pernoctar en un enclave desde el que se pueda recorrer caminando Barcelona fácilmente es algo a tener muy en cuenta. Al mismo tiempo, sorprender y sorprenderse con un hotel que se salga de lo común, puede convertir la estancia en la capital barcelonesa en algo inolvidable. Estos dos ingredientes los posee el hotel HCC St. Moritz.

HCC St. Moritz es el hotel más representativo de la cadena y uno de los más especiales que se pueden encontrar en toda la ciudad de Barcelona. Al margen de su excelente ubicación junto al emblemático Paseo de Gracia, este hotel tiene la particularidad de encontrarse en un edificio de una belleza extraordinaria cargado de historia.

Todo aquel que elija el hotel HCC St. Moritz para pasar unos días en Barcelona podrá descubrir lo que se siente al alojarse en una construcción que data del año 1.883. Pero no sólo estamos ante un edificio especial por su antigüedad de más de un siglo, también por su incuestionable belleza que se refleja en la espectacular fachada que se puede ver en la calle Diputació, 264. Las ventanas alargadas verticales de las balconadas, los dinteles decorativos de cada una de ellas y su majestuosa puerta principal son algunas de las características de una construcción que luce totalmente renovada.

Aunque fue en el año 1.990 cuando el edificio empezó a funcionar como hotel, la cadena HCC llevó a cabo una profunda renovación en 2.010 para adaptarlo a las necesidades actuales. Gracias a esta renovación, HCC St. Moritz brinda al cliente la posibilidad de gozar de las comodidades que ofrece un hotel de reciente construcción pero con el encanto incuestionable de pernoctar en un inmueble del siglo XIX. No obstante, Turespaña lo ha incluido en su lista de edificios histórico-artísticos.

Todas las peculiaridades que convierten en diferente este hotel se ven reforzadas con su excelente ubicación. La calle Diputació se encuentra junto al Paseo de Gracia, una de las vías más conocidas y representativas de la ciudad condal. Además, si hablamos de otros edificios singulares, el hotel HCC St. Moritz está a sólo diez minutos caminando de la Casa Milà y a cuatro de la Casa Batlló, dos obras maestras del genial Antonio Gaudí que todo aquel que acude a Barcelona no se puede quedar sin conocer. Por si fuera poco, el visitante sólo tendrá que andar un cuarto de hora para llegar a la Sagrada Familia,  la construcción cumbre del arquitecto nacido en Reus. Motivos más que suficientes para considerar el hotel HCC St. Moritz como un alojamiento privilegiado, además de histórico.

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