Descubre la naturaleza de Barcelona y disfruta al aire libre
Se trata de una de las ciudades más visitadas del mundo y además, una de las más urbanas, pero lo que muchos desconocen es que la naturaleza de Barcelona existe y es única. Precisamente, la capital catalana ofrece múltiples alternativas para realizar planes al aire libre y disfrutar de espacios verdes, tanto en la propia ciudad como en sus alrededores.
A continuación, descubrirás un abanico de posibilidades para los amantes de la naturaleza cerca de Barcelona, desde lugares con sorprendente fauna y flora, hasta playas paradisíacas que te dejarán con las ganas de ampliar tu estancia en la ciudad condal.
La mejor panorámica de Barcelona: el espacio natural del Delta de Llobregat
Es casi impensable que al lado de esta impresionante ciudad exista un espacio natural tan bien conservado y abierto como este, pero así es, el Delta de Llobregat, ubicado a escasos minutos del aeropuerto, es ideal para desconectar del ajetreo del día a día en Barcelona.
Por este lugar pasa uno de los ríos que irrigan la ciudad, que convierte a este entorno en el segundo más húmedo de Cataluña, por lo que la fauna y flora que se puede encontrar en el Delta del Llobregat es muy extensa y peculiar. De hecho, en sus miradores podrás observar más de 360 tipos de aves, ya que está considerada una de las mejores zonas de España para realizar birdwatching. Sin duda, una de las alternativas más apropiadas, a tan solo una hora de Barcelona, para respirar aire puro y estar en contacto con la naturaleza.
Naturaleza en Barcelona: el Montseny, reserva de la biosfera
A tan solo 50 kilómetros del centro de la capital catalana se encuentra el Montseny, que con más de 30.000 hectáreas, es el pulmón de la ciudad y un ejemplo de naturaleza en Barcelona. En él se encuentra el macizo más alto de la cordillera prelitoral catalana, con cimas como Les Agudes o el Matagalls y Turó de L’Home, que presume de 1.706 metros de altura.
Para muchos, esta es la joya de la corona en cuanto a naturaleza cerca de Barcelona, ya que su biodiversidad ha inspirado a múltiples artistas y científicos durante años. Y es que, en él se pueden encontrar bosques de encinas, robles de corcho y pinos de hasta 1.000 metros -una vegetación más propia de países del centro de Europa-.
Descubre las playas de Barcelona
Una de las mayores ventajas de viajar a Barcelona, es que cuenta con monumentos históricos y emblemáticos, pero al mismo tiempo, es posible disfrutar de su sorprendente costa. En esta diversa ciudad podrás disfrutar de hasta 9 playas, aunque las más populares, por ser las más cercanas, son: la Barceloneta, Sant Miquel y Sant Sebastià.
Otra de las ventajas de las que podrás disfrutar en las playas de la capital catalana, además de realizar todo tipo de actividades y deportes acuáticos, es que es uno de los mejores lugares para disfrutar de la gastronomía catalana, es decir, cuenta con restaurantes en la naturaleza de Barcelona. Te recomendamos que no te pierdas el Mokai Beach Bar en la playa Nova Icaria, muy cerca del Puerto Olímpico.
Siente la naturaleza de Barcelona en el Parque del Laberinto de Horta
El Parque del Laberinto de Horta, es un espacio verde ideal para los que quieren disfrutar del aire libre sin salir del centro de la ciudad. Pero, el también llamado Parc del Laberint, es mucho más que simplemente un jardín con un laberinto, y es que, te sorprenderá encontrar todos sus misterios y curiosidades. Por ejemplo, a lo largo del recorrido, te irás encontrando con la presencia de esculturas dedicadas a figuras relacionadas con la mitología clásica.
Este entorno natural y su palacio pertenecieron a la familia Desvalls hasta que en 1971 pasó a manos del ayuntamiento y fue inaugurado como jardín público. Actualmente, es un templo de la jardinería gracias a que en él se encuentra la sede del Centro de Formación del Laberinto que ofrece cursos tanto a aficionados como a profesionales del paisajismo.
En definitiva, la naturaleza de Barcelona es todo un descubrimiento para los viajeros que además de una ciudad, buscan un entorno al aire libre, verde y tranquilo. Y, esta es precisamente, la magia de la capital catalana, que ofrece todo tipo de planes para acoger a todo tipo de visitantes.
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